El Reglamento de Inteligencia Artificial de la UE publicado en 2024 establece un marco jurídico armonizado para el desarrollo, comercialización y uso de sistemas de IA en la Unión Europea, con un enfoque basado en el nivel de riesgo. Su aplicación impacta en el uso de sistemas de IA para la toma de procesos operativos, decisiones financieras, análisis de datos o gestión de carteras, exigiendo transparencia, supervisión humana y cumplimiento normativo proporcional al riesgo asociado.